Principio 6: Los líderes deben subordinar sus ambiciones y sus egos a las metas de la Unidad o de la Institución que dirigen.
Según Perry Smith, a menudo los líderes tienen que subvertir su fuerte ambición personal a fin de asegurar que el desarrollo y la maduración de sus organizaciones y el movimiento hacia niveles más altos de excelencia y ejecución se cumplan de manera cuidadosa y sistemática. El líder desinteresado gana el respeto de los subordinados y el apoyo de los superiores. Los líderes deben estar dispuestos a decir "Me equivoqué", "Cometí un error", "Acepto las responsabilidad de nuestro fracaso y estoy dispuesto a aceptar todas las consecuencias de ese fracaso". Si son demasiado ambiciosos para la organización o demasiado ambiciosos para sí mismos, pueden llevar a la organización a que no cumpla con su función. En realidad, pueden convertirse en parte del problema más que en parte de la solución.
No hay comentarios:
Publicar un comentario